Uno de los narradores, tras darse cuenta de la desaparición de las historias, decidió buscar a sus compañeros para tratar de volver a traer los cuentos a este mundo.
Era un trabajo nada fácil pues había pasado demasiado tiempo y todos los cuentistas que habían dedicado sus esfuerzos a la creación del libro supremo, se habían alejado tanto que ya era imposible juntarlos de nuevo.
Descorazonado, el narrador, se detuvo en el borde del camino y se puso a llorar. Otros caminantes hicieron un alto para interesarse por sus desventuras y si estaba en sus manos, consolarle. Él empezó a contar lo sucedido y todos los presentes atendían cautivados, de hecho, contra más hablaba más gente se paraba a escuchar.
Cuando terminó la narración y vio la emoción en las caras de los oyentes se dio cuenta que los cuentos existirían mientras hubiese ... cosas que contar.
lunes, 27 de agosto de 2007
Buscando Historias
Contado por
Hyboreo
a las
16:32
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario